Velilla del Río Carrión

Velilla del Río Carrión atesora en sus 200 km2 de territorio buena parte del Parque Natural Montaña Palentina, en su zona más occidental la denominada como Alto Carrión. Alberga un ecosistema natural de gran valor medioambiental, de paisajes espectaculares, con variada fauna donde las estrellas son el oso pardo y el urogallo, su aspecto botánico es muy digno de reseñar. Es espacio natural protegido de la Junta de Castilla y León. Presenta innumerables atractivos para todas aquellas personas que quieran disfrutar de la montaña y de todas las actividades relacionadas con la misma, desde el alpinismo, esquí de travesía, espeleología, bicicleta de montaña, hasta el simple senderismo o la tranquila visión de un paisaje sin igual. Su término municipal cuenta con un buen número de pueblos de montaña, administrado por el ayuntamiento de Velilla del Río Carrión: el propio Velilla, Alba de los Cardaños, Camporredondo de Alba, Cardaño de Abajo, Cardaño de Arriba, Otero de Guardo y los despoblados Valcobero y Valsurbio

Baña sus riberas el río Carrión, momentos antes otorga su nacimiento a la Laguna de Fuentes Carrionas. En su término municipal alberga una de las cimas más portentosa y emblemática de esta comarca de montaña, el Espigüete, visible desde gran parte de las provincias de León, Palencia e incluso Burgos. Dista una centena de kilómetros de la capital de la provincia, por la carretera CL-615 hasta Guardo siguiendo dirección norte por la P-215, a escasos 4 km para arribar en la localidad montañesa. Invita al visitante a celebrar la tradicional noche de San Juan así como las dedicadas a Nuestra Señora de Areños los días 13, 14 y 15 de agosto. Además, mantiene otras tradicionales citas en su calendario conmemorativo, como la pinada del Mayo o los Los Zamarrones, el martes de Carnaval.

Es punto de partida de innumerables rutas y sendas de montaña pero cabe destacar la Ruta de los Pantanos, que hace un recorrido por los dos embalses de su término municipal, Compuerto y Camporredondo, para coronar la travesía en Cervera de Pisuerga y la Senda del Pinar de Velilla, que se inicia en la conocida colonia del Brezo, hoy reconvertida a una reconfortante hostelería denominada, Hostel Grizzly Resorts Oso Pardo. Otras rutas de interés se resguardan al amparo de sus picos más emblemáticos, las Lomas, Peña Lampa, Pico Murcio o el Espigüete.

Plinio menciona esta comarca en su Historia Natural, lugar de las “Gontes Tamaria”. Marcando a fuego en su historia el legado de su monumento más impresionante: la Fuente de la Reana, estanque sustentado por una manantial de aguas intermitentes con 3 arcos, uno es original, y un ara romana. La leyenda popular cuenta que quien encontrara la fontana sin agua, en su primera vez… moriría, pero es eso, sin más… una leyenda. A su amparo se erige la ermita de San Juan Bautista de las Fuentes Divinas, templo de culto a dichas aguas. Ermita del siglo XIII, reparada en 1935 y con imagen de San Juan. La fuente de la Reana, la ermita de San Juan y Prado y Huerta de la Serna son conjunto histórico artístico desde el 18 de febrero de 1960. La ermita de Areños alberga una bella imagen de la Virgen sedente del siglo XIII, dorada y policromada. Ostenta buen retablo, una talla de la Asunción y otras dos de San José y San Antonio de Padua. También cabe destacar el Centro de Interpretación de la Trucha, dedicado a divulgar las costumbres y hábitat de esta especie. Unas cámaras instaladas en el interior del río permiten observarlas en su hábitat natural. Cerca de la localidad se alza la ermita de Nuestra Señora de Areños, del siglo XVI, patrona del lugar. Restos de su antiguo puente, Plaza mayor con exquisito sabor tradicional, al su amparo la iglesia del Salvador, también del siglo XVI, con buen Crucifijo y talla de la Virgen de Areños; contiguo, la fachada de un palacio barroco del siglo XVIII, con escudos de los Mogrovejo y Valdepolo. Velilla, lugar privilegiado por su entorno natural, la fotografía aquí brilla con luz propia entre los innumerables rincones a inmortalizar.